La Playa de Belén

La fecha de fundación de La Playa de Belén se remonta al 4 de diciembre de 1862, y sus fundadores fueron Doña María Claro de Sanguino, Jesús Rueda, Tiburcio Álvarez y Juan Esteban Vega. La construcción de la primera casa en 1857 por parte de María Claro de Sanguino la consagra, junto a los señores Vega, Álvarez y Rueda, como los primeros pobladores o fundadores.

Las parcialidades indígenas en la región que ahora constituye el municipio se denominaban patatoques, aratoques, aspasicas, borras, curasicas y peritamas.

El cacique más destacado fue Patatoque, cuya parcialidad compartía territorio con los indios oropomas y erobukos, respondiendo, al igual que ellos, al cacique Bucurama, asentado en las serranías de Capitanlargo, en la actual municipalidad de Abrego. La palabra Patatoque, en lengua muisca, significa "Cacique o Señor de la labranza y el río". Aunque no quedan vestigios de su cultura, un informe de una excursión arqueológica realizada el 18 de junio de 1936, presentado al Centro de Historia de Ocaña, da cuenta de ello.

Es importante destacar que el año 1857 fue testigo de numerosos cambios, ya que la Provincia de Ocaña fue eliminada el 14 de febrero de ese año, y sus tierras fueron incorporadas a la Provincia de Mompós. Sin embargo, posteriormente, con la creación del Estado de Santander el 15 de junio del mismo año, el territorio dejó de ser parte de Mompós para unirse al recién creado Estado soberano de Santander.

En el paraje de Llano Alto, donde Doña María Claro de Sanguino erigió la primera casa en 1857, se inició la fundación del municipio de La Playa de Belén. Durante la visita pastoral del obispo dominico Fray Bernabé Rojas al sitio de "Patatoque" en el mismo año, Jesús Rueda, Tiburcio Álvarez y Juan Esteban Vega obtuvieron permiso del prelado para construir una capilla dedicada a San José. Finalmente, el 4 de diciembre de 1862, el reverendo padre misionero Fray Milán la bendijo.

El 15 de septiembre de 1913, mediante el Acuerdo No 3, el caserío de La Playa fue elevado a la categoría de corregimiento, y según la Ordenanza No. 3 del 20 de marzo de 1930, la cabecera municipal se trasladó definitivamente de Aspasica al corregimiento de La Playa de Belén, que temporalmente cambió de nombre a Aspasica. Sin embargo, gracias a gestiones administrativas lideradas por el diputado Carlos Daniel Luna Manzano, se aprobó la Ordenanza No. 16 el 10 de abril de 1934, cambiando oficialmente el nombre del municipio de Aspasica por el de La Playa de Belén, mientras que el nombre Aspasica quedó asociado al corregimiento ubicado a 13 kilómetros de la población.